Se trata del médico Carlos Humberto Carvajal Baracaldo, quien venía luchando desde hace varios días contra el covid-19 en la ciudad de Neiva.
Fueron cerca de ocho días en los que el médico Carlos Humberto luchó contra el covid-19 en una Unidad de Cuidados Intensivos, no obstante, no logró vencer la enfermedad y en las últimas horas se confirmó su lamentable fallecimiento.
Carvajal Baracaldo estudió medicina en la Universidad Surcolombiana y tenía una especialización en la Universidad Metropolitana de Barranquilla. Así mismo, trabajaba como coordinador de la Clínica Fracturas de Neiva.
Su esposa, Fanory Álvarez Chilatra, con quien hoy 27 de diciembre iba a cumplir 12 años de casado, expresó a través de redes sociales su tristeza por el fallecimiento de su compañero sentimental.
“Hoy 27 de diciembre de 2020, estamos de aniversario amor mío, 12 años a tu lado, dónde te hice una promesa de amor, esta promesa la cumplí tal cual como te la prometí, te fui fiel, estuve contigo en las buenas y en las malas, te acompañé en la enfermedad, en las alegrías, en las tristezas, fuimos un excelente equipo, mi esposo, amigo y confidente», sostuvo.
De igual manera, añadió: “Le doy gracias a Dios porque me dio un hombre responsable, comprometido en el hogar, dedicado a sus hijos que los amó y luchó hasta último momento por mantenerse por el amor a los mismos…pero, aunque suena fácil decir estas palabras tan fríamente, no es así porque mi corazón está partido en dos; aunque no lo debería estar porque ayer te fuiste para el cielo a gozar de la vida eterna a descansar al lado de papito Dios”.
Finalmente, manifestó: “Tristemente somos seres humanos y terrenales que sentimos y nos duele la pérdida de un ser querido y hoy este ser querido es mi esposo, el padre de mis hijos a quien un día le jure amor eterno…Mi vida hermoso, mi cielo hoy mi corazón está destrozado, tu partida me ha dejado sin alientos…pero yo sé que Dios me dará la fuerza para seguir luchando y más aún por nuestros retoños de amor, nuestros dos hermosos hijos…este no es un adiós si no un hasta pronto a la eternidad, espérame allí que cuando Dios lo decida estaremos juntos nuevamente…te amo y te amare hasta la eternidad mi amado esposo. Cuídate, que el Covid no te arrebate a los seres queridos. Dios mío dame fortaleza para soportar tanto dolor en mi corazón”.
