Un escabroso hallazgo tiene consternados a los trabajadores de la planta de tratamiento de aguas residuales de la Empresa de Alcantarillado de Santander, Empas, en la Ptar Río Frío, ubicada en la vía que del anillo vial comunica a Floridablanca con Girón.
Mientras desempeñaba sus labores normales de la jornada laboral, un trabajador se encontró un feto. El empleado de la compañía se encontraba haciendo limpieza a una de las rejillas de la planta, cuando vio, allí, el pequeño cuerpo. Inmediatamente, el hombre le informó esto a su jefe, quien, a su vez, hizo el respectivo llamado a las autoridades.
La confirmación de esta noticia la hizo la misma Empas, a través de un comunicado dirigido a la prensa y la opinión pública. “Con profunda tristeza lamentamos el hallazgo de un feto en la fase de tratamiento preliminar de la Planta de Tratamiento de Aguas residuales, Ptar Río Frío”.
En la misiva se relató, como ya se mencionó previamente, que el operador de turno, informó sobre esta ‘situación atípica’ a su superior laboral. “Con las normas establecidas en la Subgerencia Tratamiento Integral de Aguas y Residuos, Tiar, procedimos a informar las novedades y situaciones atípicas al jefe inmediato, quien realizó el respectivo informe a la autoridad competente a través de la línea de emergencia Nacional 123, que en este caso fue la Policía Nacional”.
Lo que explicó Empas fue que, ante el llamado de emergencia, la Policía Nacional llegó de la mano del CTI de la Fiscalía General de la Nación. Durante el procedimiento, las autoridades, se lee en el comunicado, hicieron “los procedimientos de rigor y trámites pertinentes”.
Por el otro lado, el diario Vanguardia, tuvo la posibilidad de ahondar más en el desafortunado hecho y, con ayuda de especialistas, entregó algunos detalles nuevos sobre aquel cuerpo. Según manifiesta ese medio de comunicación, el feto tendría cerca de 20 centímetros de longitud, así mismo, reportó que estaba formado ‘casi en su totalidad’, En su nota, el informativo resalta que, según testigos, el feto habría sido arrojado a un afluente y, tras un largo recorrido, habría llegado hasta las instalaciones de Empas, en el Anillo Vial, a través de uno de los tubos que componen a esa estructura.
“Tendría unas 23 semanas que equivalen a cinco meses de gestación (…) etapa en la que ya se puede determinar el sexo del bebé y las condiciones físicas en que nacería”, reveló un médico consultado por Vanguardia que, además de entregar esta información, concluyó diciendo que el cuerpo dejaba en evidencia que, al parecer, el menor tendría una malformación en el cerebro, sin embargo, eso solo lo dirá el dictamen forense que entreguen los especialistas de Medicina Legal.
Por: infobae.com / Foto referencia de: Vanguardia
