El cuerpo de Marilyn Pérez no aparece y se presume que pudo ser enterrado con la identidad de otro fallecido.
Este martes se cumplen 8 días desde que la clínica El Prado en Barranquilla notificó a los familiares de la enfermera Marilyn Pérez la noticia de su fallecimiento por sospecha de COVID-19 y, hasta este momento, desconocen el paradero de su cuerpo.
Se presume que pudo haber sido enterrado con otra identidad en el cementerio Jardines de la Eternidad, debido a las constantes confusiones en la entrega de cadáveres entre clínicas y funerarias.
«Clínica del Prado asegura que el cuerpo de mi madre se encuentra en la tumba de José García. Nos hicieron firmar un acta en vano porque la única certeza de saber que su cuerpo está allí, es que exhumen el cuerpo y aún no se ha logrado un acuerdo entre las partes», explicó Katherine Pérez, hija de la fallecida.
Por ello, la familia de la enfermera instauró, contra la clínica El Prado y la funeraria Jardines de la Eternidad, una denuncia penal ante la Fiscalía por el delito de desaparición forzosa de cadáver.
«No entendemos por qué tantas dilataciones. Al llegar el día 8, por cuestiones de salubridad, no se puede exhumar el cuerpo y no se puede reconocer. Aún tenemos la boleta de salida, los entes de control no lograron aprobar la exhumación y ya nos tocó proceder con acciones legales», agregó Pérez.
Los entes de control ya adelantan una investigación a la clínica para determinar si hubo o no responsabilidades en el caso.
Por: bluradio.com / Foto: AFP