El presidente Gustavo Petro reaccionó en la madrugada de este jueves, desde su cuenta oficial de X, a la investigación publicada por El País de España que apunta a un supuesto plan de Álvaro Leyva para deponerlo con apoyo de sectores republicanos en EE. UU.
“Pensé que Leyva se merecía el puesto”
Petro explicó que nombró a Leyva como canciller “sin cálculo político” y por reconocimiento a su trayectoria. Aseguró que, pese a ello, ha sido “víctima de injurias” provenientes del exministro:
“No quise aceptar pasos oscuros en la Cancillería… tampoco quise que su hijo ocupara la Embajada”, escribió.
El mandatario también aludió a la sanción disciplinaria impuesta a Leyva por la Procuraduría en el caso de la licitación de pasaportes y afirmó que la negativa a permitir nombramientos hereditarios provocó el distanciamiento.
Defensa cerrada del Estado
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, advirtió:
“Quien actúe ilegalmente contra el Presidente o las instituciones atenta contra la Nación… Defenderemos la soberanía y la integridad con todas nuestras capacidades”.
Reacciones en el gabinete
- Eduardo Montealegre, ministro de Justicia, calificó de “afrenta a la democracia” cualquier intento de golpe.
- La Casa de Nariño mantiene canales con la Fiscalía y la Corte Suprema para evaluar si los audios revelados ameritan investigación formal por conspiración.
Contexto del escándalo
- El País publicó audios en los que Leyva, supuestamente, pide apoyo a asesores cercanos a Donald Trump para forzar la salida de Petro y posicionar a la vicepresidenta Francia Márquez.
- Leyva no ha respondido públicamente; se encontraría en Madrid alegando motivos de seguridad.
Qué sigue
- Revisión jurídica de los audios por la Comisión de Acusaciones.
- Posible citación al Congreso para que el Gobierno exponga las pruebas de la presunta conspiración.
- Refuerzo de la seguridad presidencial mientras avanzan las pesquisas.
Petro concluyó su hilo acusando a ciertos sectores de la “oligarquía” de actuar con doble moral y reiteró que la “democracia no es hereditaria”. El choque con Leyva —figura clave del proceso de paz— se convierte en el episodio político más tenso del año.