Que no nos traten de tontos, o confirmemos que lo somos en octubre
Es alarmante y preocupante a la vez, el aumento de encuestas dudosas y grotescas en Neiva para las próximas elecciones para Alcaldía y Concejo. ¿Subestiman a la población? ¿Logran confundir cuando son como mínimo incoherentes y hasta parecen de ciencia ficción? ¿Los ciudadanos realmente las creen?
Cada vez que un tema me parece complejo como este, o siento que me cuesta entenderlo, busco toda la información posible para imaginar una explicación que mis alumnos de todas las edades comprendan. Con lo que está pasando con este tema de las encuestas, en estos tiempos, me resulta realmente muy difícil porque hay cosas inexplicables. Y cuando trato de comprenderlo, aparece otra encuesta que hasta genera risa.
Siempre existieron las tendencias y uno puede notar que al líder del Grupo Significativo de Ciudadanos ‘Acciones por Neiva’, German Casagua, absolutamente ninguna encuesta (desde la más mentirosa e inverosímil, hasta la más seria), lo pone en primer lugar indiscutido. Genera dudas luego que muchos de los que figuran en el batallón de abajo simulan cosas: desde ser opositores, ocultan su apellido y ataduras con la Administración actual, esperan las migajas del Gobierno Nacional que ignora a la región castigándola por los pocos votos que obtuvo aquí, actúan también fingiendo una “lucha contra la corrupción” que claramente en su día a día no sienten e inclusive buscan temas de moda que se nota son sobreactuados. Ahí comienza la falta de respeto numérica. Debería existir una sanción para la especulación lucrativa que modifica resultados y hasta a veces ni siquiera realizan tarea de campo profesional y seria.
Todo el mundo tiene derecho a querer vivir mejor, ganar dinero y hacer negocios. Lo llamativo es que todos se acuerdan tarde y montan empresas encuestadoras improvisadas de la nada y se regalan para convencer a los candidatos de que son las mejores del mundo a pesar de que no se les ve experiencia ni antigüedad para después conseguir algún contrato burocrático. Lo barato sale caro y pocos aspirantes lo recuerdan.
Esta carencia de credibilidad y proliferación de encuestas dudosas presenta resultados cada vez más grotescos. Desean confundir a la ciudadanía, plantean una seria amenaza para la integridad del proceso democrático y el ejercicio de una elección justa y transparente. Son hasta antipáticas.
“Deficiencias metodológicas” que no hacen más que coincidir con la poca aceptación que tienen ante la ciudadanía. Carecen de fundamentos sólidos, muestras representativas y análisis estadísticos rigurosos, una manipulación más de los grupos a los que representan que poco piensa en los intereses de la ciudadanía. ¡Pobres mis niños que tienen que convivir con tanta mala información para comprender la realidad adulta que comprometerá su inicio de la vida madura!
Contradicen el sentido común y buscan apoyar inflando candidatos que no saben más que comprar voluntades. No tienen carisma, solo juegan con las necesidades de esta Nación en crisis económica y de valores.
Son irresponsables y buscando distorsionar la percepción pública para lucro personal, generan un riesgo para nuestra amada Neiva que está abandonada y cayéndose a pedazos. Los medios y los oscuros personajes que se disfrazan de páginas informativas en redes sociales no hacen más que colaborar para que esto empeore, pero ellos solo piensan en sus bolsillos.
Ojalá miremos más a los que promueven la transparencia y el respeto y han demostrado acciones constantes en los últimos años en favor de la Ciudad donde todos elegimos o nos toca vivir.
Por: Claudia Sandoval, ‘La Profe’
