Cenit Emilse Paéz y Cristian Mauricio Serrano Lozada, acusados de haber matado a su bebé, Juan Sebastián Páez Hernández, en lamentables hechos registrados en diciembre de 2018 en el asentamiento ‘La Primavera’ de Neiva (Huila), son buscados por las autoridades luego de haberse volado en las últimas horas de su residencia.
Páez y Serrano recibieron este insólito beneficio debido a que un juez de garantías, tras la captura, consideró que «ya el niño está muerto y ellos ya no eran un peligro» para la sociedad, pese a que les endilgaron los delitos de tortura y violencia intrafamiliar, además de homicidio agravado.
Pero cuando la Fiscalía logró revocar la medida, después de meses de lucha, e iba a proceder a la conducción de los presuntos homicidas a un establecimiento carcelario, los progenitores del menor muerto ya no estaban en su residencia.
“El menor aparece lesionado de una manera no muy clara en su lugar de habitación, con trauma en el lado derecho del cuerpo y que daña un pulmón y parte del corazón”, manifestó Alberto Tejada, médico especialista en Medicina Forense del Instituto de Medicina Legal, en declaraciones recogidas por Noticias Caracol.
La necropsia practicada al menor evidenció que fue tal la sevicia de sus agresores que tenía fractura en costillas, perforación en un pulmón y estallido del corazón, que tenía cerca de 14 lesiones, causadas por un objeto contundente.
Por: hsbnoticias.com