En el sector del barrio La Colina, de Piedecuesta, fue encontrado el cuerpo sin vida de una niña de tres años que fue arrastrada por el río de Oro.
Cuando varios areneros y personas que estaban en una escuela cercana a la ribera del Río de Oro, se percataron del cuerpo de una persona que era arrastrado por el agua.
Juan Pablo Rangel, quien a esa hora estaba recibiendo una llamada, manifestó que “ahí también estaban unos areneros cuando vimos que una señora bajaba por el río, tenía los brazos abiertos y un remolino la movía, de inmediato dimos aviso a un bombero que estaba cerca y junto a los areneros sacaron el cadáver y lo envolvieron. En ese mismo lugar, la mañana de este jueves encontraron en cuerpecito de una niña de tres años, estaba como enterradita en la arena”.
Efectivamente organismos de socorro, adscritos a Gestión del Riesgo de Santander, anunciaron la mañana de este jueves 9 de julio, el hallazgo del cuerpo de la menor, justo en el mismo sector donde hallaron el cadáver de la mamá, de 41 años.
Cabe recordar que las dos fueron arrastradas por la creciente del río de Oro en el sector de El Cobre, en zona rural de Piedecuesta.
Al ver cómo su hija era empujada por la fuerza de las aguas, la mujer identificada como Luz Amparo Hernández Velandia saltó a rescatarla, pero falleció en el intento. El cuerpo de Hernández Velandia fue hallado el miércoles en la noche.
Según información entregada por el director de Gestión del Riesgo departamental, César García, las actividades de rescate fueron reanudadas en la mañana de este jueves, con la presencia de cerca de 50 unidades.
«La menor fue hallada en el mismo sitio donde se rescató a la mamá. La otra hija, de 17 años en estado de gestación, se recupera satisfactoriamente en un centro asistencial de la zona», dijo García.
Así fue el rescate de la menor
El cuerpo de la menor de tres años fue hallado a 20 metros de donde hallaron el de la mamá, estaba atrapado entre una empalizada, solo se le veía una mano, de inmediato los areneros dieron aviso a los hombres de Ponalsar que estaba cerca.
Hombres del CTI arribaron y realizaron el levantamiento del cuerpo, ante la mirada afligida de familiares, entre ellos es papá, quien lloraba sin consuelo.
Tras 40 minutos de labores, el comandante de Ponalsar tomó en brazos el pequeño cadáver ya embalado y atravesó el afluente.
Por: Vanguardia.com / Fotos: Vanguardia