La madre justificó ante las autoridades que así podía corregir el comportamiento de su hijo.
La Policía Metropolitana de Barranquilla fue alertada por la ciudadanía, ante los llamados que se registraban en una vivienda del barrio Carruajes en Galapa, donde las autoridades capturaron a una mujer que tenía a su hijo de 10 años atado con una cadena de hierro en una silla.
La madre justificó su forma actuar, porque según ella, para corregir al menor.
La mujer fue trasladada a las instalaciones de la URI, por el delito de violencia intrafamiliar, mientras que el niño fue conducido al hospital de Galapa al presentar desnutrición grado 1, con cicatrices en su piel y señales de maltratos.
La Policía de Infancia y Adolescencia restablecieron los derechos del menor, que fue dejado a disposición de bienestar familiar.
Por: Caracol Radio